6 consejos para prevenir y reducir el conocido como “mal de mar”
El mareo abordo de una embarcación es un estado que limita a quien lo sufre en todos los sentidos. Conocido técnicamente como cinetosis, este es provocado por un conflicto entre el sentido de la vista y el sentido del oído, ya que la vista le dice al cerebro que no nos estamos moviendo y el oído dice lo contrario -mientras que con la vista apenas percibimos el movimiento, nuestro oído interno sí lo detecta. Nuestro cerebro traduce esta información contradictoria en desequilibrio y físicamente la sensación es de nauseas, excesiva salivación, bostezos muy seguidos, sudor frío, vómitos y unas inmensas ganas de que pase lo antes posible.
También conocido como “mal de mar”, el mareo abordo puede impedir que disfrutemos de nuestra ruta náutica. Para que esto no ocurra, te dejamos con seis consejos básicos que te ayudarán a prevenir y reducir los mareos en tus travesías.
- Antes de zarpar: vigila tu alimentación y tu descanso.
Parece básico, pero es imprescindible recordarlo: el descanso y la alimentación previos a la travesía son aspectos clave. El cansancio y el hambre pueden incrementar las probabilidades de que nos mareemos. De modo que debes asegurarte de descansar lo suficiente durante la noche anterior y tienes que evitar tanto comidas copiosas como bebidas alcohólicas.
- Hidrátate: antes y durante la travesía.
La hidratación es otro elemento esencial. En este sentido, no hay nada como el agua mineral. Bebe mucha agua y asegúrate de que tu cuerpo está hidratado, sobre todo cuando las temperaturas son altas. Y recuerda que es recomendable evitar bebidas alcohólicas, bebidas demasiado ácidas y lácteos.
- Aprovisiónate de medicamentos anticinetósicos, remedios naturales y/o pulseras contra las náuseas.
Existen diversas opciones para prevenir y combatir la cinetosis en el mar. Debes conocerlas y decidir cuáles son las más apropiadas para ti y para la tripulación. En el mercado encontramos tanto medicinas anticinetósicas como remedios naturales e incluso pulseras anti mareo.
- Sitúate en el lugar más cómodo del barco.
Procura colocarte en el lugar más confortable de la embarcación y desde el que puedas fijar la vista al horizonte -te ayudará-. Evita fijar la vista en objetos en movimiento. También debes tener cuidado en un fondeo con los bamboleos del barco; alejarte de los humos del escape o el olor a gasoil; evitar entrar al interior del barco, salvo que sea para dormir, y cuidado con la cabeza, no la agaches o los síntomas pueden volver a aflorar. Si decides meterte dentro de la embarcación a dormir, elige el camarote más a popa porque estará menos afectado por el movimiento del barco.
- Mantente activo.
Si no te encuentras demasiado mareado, es mejor mantenerte activo con sencillas tareas en cubierta. Se suele recomendar a quien empieza con síntomas de mareo que se ponga al timón y fije su vista en el horizonte.
- No desistas, es cuestión de tiempo que tu cuerpo se acostumbre al movimiento de la embarcación.
Date tiempo. Empieza con travesías de corta duración y verás cómo, poco a poco, vista y oído van adaptándose a la navegación.
Hay personas que no se marean nunca y otras que se marean siempre, aunque también hay cantidad de nuevos navegantes -y no tan nuevos- que se marean solo ante ciertas situaciones. En muchos de estos casos, se puede evitar o reducir el mareo tomando las debidas precauciones y siguiendo los consejos anteriores.