Para qué sirven y cómo deben hacerse
Según la Real Academia de la Lengua un nudo es “un lazo que se estrecha y cierra de modo que con dificultad se pueda soltar por sí solo, y que cuando más se tira de cualquiera de los dos cabos, más se aprieta”. El nudo marinero, en concreto, además de seguro, es fácil de deshacer “a voluntad”.
La historia de los nudos en la navegación es tan extensa como la propia navegación en sí misma. El paso de los siglos ha causado una evolución en los nudos marineros consiguiendo que cada nudo tenga una función y una manera peculiar de elaborarse para cumplir su función concreta. Asimismo, y como hemos especificado anteriormente, cada nudo se puede soltar cuando sea necesario con relativa facilidad, aunque haya sido sometido a mucha tensión. No es cuestión de elaborar un nudo gordiano, del cual se decía que aquel que consiguiera desatarlo reinaría en Asia y cuya solución la encontró Alejandro Magno, que incapaz de desatarlo sacó su espada, lo cortó y acabó conquistando Oriente.
Los nudos marineros se pueden diferenciar por la función que deben cumplir, el material del que están hechos y los diámetros de los cabos que se desean unir.
Las partes de un cabo son el chicote, el firme y el seno.
- Chicote: es el extremo del cabo. Habitualmente, un cabo tiene dos chicotes o extremos.
- Firme: es la parte del cabo alrededor de la cual se va a hacer el nudo.
- Seno: es la forma que toma el cabo cuando se va a hacer un nudo, generalmente entre el chicote y el firme.
Ante la gran cantidad de nudos que se han creado con el paso del tiempo, pasamos a destacar aquellos que se usan con más frecuencia y son asequibles para cualquier aficionado a la náutica.
- As de guía. Es el nudo más utilizado y el más conocido. Se usa comúnmente para sujetar escotas, drizas o para encapillar un extremo de una amarra en un noray, entre otros muchos usos. Se trata de un nudo que trabaja muy bien con tensión y que se puede soltar con facilidad, aunque haya soportado una fuerza muy alta.
- Ballestrinque. Usado para amarrar un cabo a una superficie redondeada principalmente, debe tener una tensión continua, ya que, si la pierde, podría soltarse. Para asegurarse de que no se va a soltar se le añade un cote como reza el dicho, con un ballestrinque y un cote queda amarrado el bote.
- Nudo llano. Se usa para unir dos cabos del mismo diámetro. Si fueran de un diámetro diferente correría uno sobre el otro y acabarían soltándose. Para cabos de diferente diámetro podríamos utilizar una vuelta de escota.
- Ocho o lasca. Se utiliza con frecuencia para impedir que el extremo libre de un cabo se escape, evitando así que caiga al agua y cree un problema como podría ser enredarse en la hélice. Se podría definir como nudo de tope.
En náutica es clave conocer los nudos necesarios para garantizar la máxima seguridad en cada travesía.
Recuerda: antes de zarpar tenemos que hacer un repaso a todos los nudos que usaremos durante nuestro recorrido. Asimismo, una vez hemos vuelto a puerto, nos aseguraremos de que los ases de guía y los ballestrinques están bien realizados y de que el barco, por tanto, ha quedado amarrado con seguridad.